Los niños quemados extensos son uno de los casos más delicados que puede enfrentar un equipo médico. Aquí te contaré sobre sus causas, tratamiento y cuidados.
Las quemaduras en niños son comunes y pueden ser causadas por volcamiento de agua caliente, contacto con objetos calientes y, en casos más graves, por fuego.
Si tu hijo ha sufrido una quemadura extensa o grave, es importante que sepas que hay esperanza y que existen profesionales capacitados para tratarla.
En este artículo, te cuento algunas cosas importantes que necesitas saber sobre los niños quemados graves.
Causas de las quemaduras extensas en niños
Las quemaduras en niños suelen ser causadas por accidentes en casa. Alrededor del 70% de las quemaduras en niños son causadas por volcamiento de líquidos calientes, como tazas de té, platos de sopa, ollas y hervidores.
Otras causas comunes son el contacto con objetos calientes, como estufas, planchas de ropa, planchas de pelo y braseros. Las quemaduras por fuego, aunque son menos frecuentes, pueden ser más graves por la extensión y profundidad que alcanzan.
Tratamiento y cuidados para niños quemados extensos
Si tu hijo ha sufrido una quemadura grave, es importante que reciba atención médica inmediata.
El proceso de tratamiento y sanación puede ser largo y complicado, pero con el apoyo adecuado, tu hijo puede recuperarse.
Probablemente requiera dos o tres semanas de hospitalización, apoyo los primeros días en UCI o UTI y múltiples procedimientos quirúrgicos durante ese tiempo para conseguir una nueva cobertura de piel (aseos quirúrgicos seriados, escarectomías, coberturas piel temporales, injertos, etc.).
Es importante que los padres estén tranquilos y sigan las indicaciones del equipo médico, que tiene la experiencia y los conocimientos necesarios para tratar a los niños grandes quemados.
Mis consejos para los padres de niños grandes quemados
Si tu hijo ha sufrido una quemadura extensa, es importante que no te sientas culpable.
Los accidentes ocurren y así lo entendemos los equipos tratantes. Es muy importante que te mantengas fuerte y centrado en tu hijo, te apoyes en tu círculo más cercano y en el equipo médico que está a cargo de la salud de tu hijo.
Es inevitable que surjan un montón de consejos de personas que no tienen la experiencia ni los conocimientos necesarios para tratar niños quemados; evítalos y enfócate en obtener información del equipo médico que elijas y sigue sus indicaciones.
También es necesario evitar las visitas innecesarias
El niño necesita sólo a sus familiares cercanos habituales, mamá, papá, tal vez un hermano o abuela, nada más.
Un niño que se ha quemado y que está hospitalizado tiene sus defensas muy bajas; se puede contagiar fácilmente algún resfrío, una diarrea, una neumonía u otro virus traído por alguna visita.
Agregar un simple resfrío a un paciente que ha sufrido una quemadura extensa puede empeorar su condición basal y hacer más riesgosas sus cirugías.
Cuando termina la hospitalización
Terminada la etapa de hospitalización y una vez que se ha conseguido que vuelva a tener su propia piel de nuevo comenzará la etapa de rehabilitación ambulatoria a cargo de un equipo multidisciplinario.
Aun así, probablemente el niño tendrá algunas cicatrices y con el tiempo será necesario que todos lo vayan asumiendo, tanto el paciente como su familia.
Los niños se miran primero en los ojos de sus padres, por eso es tan importante que los padres entiendan y acepten bien todo el proceso y las cicatrices que puedan quedar tras la quemadura de su hijo.
En resumen
Las quemaduras extensas en niños pueden ser causadas por un accidente doméstico.
Si tu hijo ha sufrido una quemadura extensa, es importante que reciba atención médica inmediata y que sigas las indicaciones del equipo médico.
Con el apoyo adecuado, tu hijo puede recuperarse y volver a ser el niño feliz y activo que era antes de la quemadura.